Érase una vez… El pacto FARC-EP─"paras" no ha resultado fácil de digerir por su sabor y aspecto áspero. Deja entrever que las dos facciones llegaron a alcanzar similares niveles de ferocidad. Pero entonces… ¿En nombre de quién se batieron…? ¿Del fundamentalismo? ¿fueron ajenos de la sangre derramada de humildes hombres y mujeres del trabajo? El horror al ultimar las víctimas desde los "paras" con ello desarman el revolucionarismo de los farianos por sus “principios y alta moral” que marcaban presumiblemente la diferencia. ¡Qué tal si un día de tantos se encuentran fundidos en un único partido y de la mano! Entonces quedará como impronta impune la estela genocida en un mismo plano como testigo fiel de la barbarie.

Sapos tan extravagantes e inflados ─según esto─ las masas esquilmadas quienes pusieron los muertos del conflicto pueden ser inducidas a ser tragados.  Su sarcasmo ─de quienes posan a manteles─ los sitúa en un mismo círculo de crueldad amen de tantos sacrificados por mera sospecha. No valió la pena medio siglo de sufrimiento y tragedia. Pero lo transcurrido en este escenario nacional tiene la fuerza histórica para refundir en el tiempo lo padecido por la población que vivió el flagelo de la pequeña burguesía oportunista disfrazada de revolucionarismo quitando a empellones al proletariado del puesto que le corresponde.

Las masas del trabajo le pondrán lupa y cuidado al momento en que agarrándose a picos se unan cuando antes se desollaban vivos incluso, cuando vayan de la mano en las listas electorales o apoyando un candidato a la presidencia.

Esta alianza resulta impredecible, indescifrable e irreconocible. El mensaje ofrecido al mundo puede interpretarse en el sentido de que la vida no vale nada de cuantos quedaron tendidos mordiendo el polvo ─tipo oeste─ y que las balas son determinantes y ponen las condiciones en la contienda dando la enseñanza por su puesto de que para el futuro esta es la vía o, por el contrario, que esta instancia de combate no tiene significación ni valor alguno en la lucha de clases.